¿Quién es Balieri? ¿Es un hombre, un niño, un trabajador, un padre de familia, un aventurero, un soñador, un loco? ¿Está vivo Balieri o ya murió? Balieri es uno y somos todos. Reside en el mundo perfecto de lo imaginado, de la metamorfosis, de la magia. Puede hablarnos de cualquier cosa, participar en la peripecia más extraordinaria, intoxicarnos con su universo hasta que los prodigios se nos figuren costumbre. Balieri lo cuestiona todo, de todo se sorprende y a todo alcanza con su singular discernimiento. En estos microrrelatos, que se saborean como adictivas pastillas de menta, Carlos Candiani refresca la tradición del realismo mágico a través de un personaje lleno de aristas, que recorre las emociones humanas en un brinco continuo entre la extrañeza y la ironía. Tenga cuidado con Balieri; cuando lo conozca todo su mundo quedará contagiado por la mirada polícroma de este indescriptible protagonista.
¿Quién es Balieri? ¿Es un hombre, un niño, un trabajador, un padre de familia, un aventurero, un soñador, un loco? ¿Está vivo Balieri o ya murió? Balieri es uno y somos todos. Reside en el mundo perfecto de lo imaginado, de la metamorfosis, de la magia. Puede hablarnos de cualquier cosa, participar en la peripecia más extraordinaria, intoxicarnos con su universo hasta que los prodigios se nos figuren costumbre. Balieri lo cuestiona todo, de todo se sorprende y a todo alcanza con su singular discernimiento. En estos microrrelatos, que se saborean como adictivas pastillas de menta, Carlos Candiani refresca la tradición del realismo mágico a través de un personaje lleno de aristas, que recorre las emociones humanas en un brinco continuo entre la extrañeza y la ironía. Tenga cuidado con Balieri; cuando lo conozca todo su mundo quedará contagiado por la mirada polícroma de este indescriptible protagonista.