Author: | William Walker Atkinson | ISBN: | 1230000452137 |
Publisher: | Editorial Hoplita | Publication: | April 20, 2013 |
Imprint: | Language: | Spanish |
Author: | William Walker Atkinson |
ISBN: | 1230000452137 |
Publisher: | Editorial Hoplita |
Publication: | April 20, 2013 |
Imprint: | |
Language: | Spanish |
Cuando nos percatamos de que el Pensamiento es una fuerza (una manifestación de energía) con un poder de atracción semejante al de una magneto, comenzamos a entender el porqué de muchas cosas que hasta este momento nos parecían obscuras. No hay un estudio que retribuya mejor al estudiante por su tiempo y esfuerzo como el estudio de cómo funciona esta poderosa ley del mundo del Pensamiento: la Ley de la Atracción.
Cuando pensamos enviamos vibraciones de una fina sustancia etérea, la cual es tan real como las vibraciones que manifiestan luz, calor, electricidad y magnetismo. El que esas vibraciones no sean evidentes para nuestros cinco sentidos no prueba que no existan.
Emitimos pensamientos de mayor o menor intensidad todo el tiempo, y cosechamos sus resultados. Nuestras ondas de pensamiento no solo influyen en nosotros y los demás, sino que, además, poseen un poder de atracción, atraen hacia nosotros los pensamientos de los demás, cosas, circunstancias, personas y “suerte”, acordes al carácter de los pensamientos principales en nuestra mente. Los Pensamientos de Amor atraerán a nosotros el amor de los demás; las circunstancias y entornos acordes al pensamiento; personas que son de pensamientos similares. Los pensamientos de Ira, Odio, Envidia, Malicia y Celos atraerán a nosotros la camada de pensamientos similares que emanan de la mente de los demás, las circunstancias propicias para que tales pensamientos se manifiesten, las personas que manifiestan negatividad; y así sucesivamente.
Un pensamiento intenso o constante nos convertirá en el centro de atracción de las ondas correspondientes de los demás. Lo semejante atrae a lo semejante en el Mundo del Pensamiento; “cosecharéis lo que hayáis sembrado”. Los pájaros de plumaje parecido vuelan juntos en el mundo del pensamiento; y las maldiciones, como las gallinas, vienen a casa a cocinarse, además de traer a sus amigos con ellas.
Cuando nos percatamos de que el Pensamiento es una fuerza (una manifestación de energía) con un poder de atracción semejante al de una magneto, comenzamos a entender el porqué de muchas cosas que hasta este momento nos parecían obscuras. No hay un estudio que retribuya mejor al estudiante por su tiempo y esfuerzo como el estudio de cómo funciona esta poderosa ley del mundo del Pensamiento: la Ley de la Atracción.
Cuando pensamos enviamos vibraciones de una fina sustancia etérea, la cual es tan real como las vibraciones que manifiestan luz, calor, electricidad y magnetismo. El que esas vibraciones no sean evidentes para nuestros cinco sentidos no prueba que no existan.
Emitimos pensamientos de mayor o menor intensidad todo el tiempo, y cosechamos sus resultados. Nuestras ondas de pensamiento no solo influyen en nosotros y los demás, sino que, además, poseen un poder de atracción, atraen hacia nosotros los pensamientos de los demás, cosas, circunstancias, personas y “suerte”, acordes al carácter de los pensamientos principales en nuestra mente. Los Pensamientos de Amor atraerán a nosotros el amor de los demás; las circunstancias y entornos acordes al pensamiento; personas que son de pensamientos similares. Los pensamientos de Ira, Odio, Envidia, Malicia y Celos atraerán a nosotros la camada de pensamientos similares que emanan de la mente de los demás, las circunstancias propicias para que tales pensamientos se manifiesten, las personas que manifiestan negatividad; y así sucesivamente.
Un pensamiento intenso o constante nos convertirá en el centro de atracción de las ondas correspondientes de los demás. Lo semejante atrae a lo semejante en el Mundo del Pensamiento; “cosecharéis lo que hayáis sembrado”. Los pájaros de plumaje parecido vuelan juntos en el mundo del pensamiento; y las maldiciones, como las gallinas, vienen a casa a cocinarse, además de traer a sus amigos con ellas.