Author: | Casa Editora Cristiana Gnóstica | ISBN: | 1230000489744 |
Publisher: | Publicaciones LDS | Publication: | June 15, 2015 |
Imprint: | Language: | Spanish |
Author: | Casa Editora Cristiana Gnóstica |
ISBN: | 1230000489744 |
Publisher: | Publicaciones LDS |
Publication: | June 15, 2015 |
Imprint: | |
Language: | Spanish |
Es un hecho histórico que los gnósticos fueron los primeros teólogos del cristianismo, quienes aplicaron la filosofía griega a esta novedosa corriente religiosa, pero los Evangelios Gnósticos van más allá de la teología o la filosofía, atañen realmente a la iluminación crística y a la experiencia mística directa, pues sin estas herramientas sagradas se dificulta su comprensión.
La clave será siempre tener encarnado al Cristo en nuestros corazones, no sólo para comprender estos textos sagrados sino para comprendernos a nosotros mismos y al macrocosmos infinito.
Lo invitamos a penetrar en este extraordinario conocimiento, para lo cual no se necesitan mayores elementos que la buena voluntad y el ferviente anhelo de encarnar en sí mismos al Cristo vivo, y así como dijo el poeta Amado Nervo: “Los problemas insolubles de los fines y las causas primeras, que han fatigado a la filosofía, serán para nosotros diáfanos y sencillos, y no habrá para nuestro espíritu nada ilógico, nada injusto, nada negro en la vastedad del universo…”
Es un hecho histórico que los gnósticos fueron los primeros teólogos del cristianismo, quienes aplicaron la filosofía griega a esta novedosa corriente religiosa, pero los Evangelios Gnósticos van más allá de la teología o la filosofía, atañen realmente a la iluminación crística y a la experiencia mística directa, pues sin estas herramientas sagradas se dificulta su comprensión.
La clave será siempre tener encarnado al Cristo en nuestros corazones, no sólo para comprender estos textos sagrados sino para comprendernos a nosotros mismos y al macrocosmos infinito.
Lo invitamos a penetrar en este extraordinario conocimiento, para lo cual no se necesitan mayores elementos que la buena voluntad y el ferviente anhelo de encarnar en sí mismos al Cristo vivo, y así como dijo el poeta Amado Nervo: “Los problemas insolubles de los fines y las causas primeras, que han fatigado a la filosofía, serán para nosotros diáfanos y sencillos, y no habrá para nuestro espíritu nada ilógico, nada injusto, nada negro en la vastedad del universo…”