Author: | Jorge Eliécer Martínez Posada, Fabio Orlando Neira Sánchez | ISBN: | 9789589290972 |
Publisher: | Universidad de La Salle | Publication: | January 1, 2009 |
Imprint: | Language: | Spanish |
Author: | Jorge Eliécer Martínez Posada, Fabio Orlando Neira Sánchez |
ISBN: | 9789589290972 |
Publisher: | Universidad de La Salle |
Publication: | January 1, 2009 |
Imprint: | |
Language: | Spanish |
La casi milenaria tradición de la Universidad ha permitido crear un conjunto de prácticas con las cuales ésta ha querido hacer presencia en la sociedad e iluminar su contexto desde lo que le es propio y desde las funciones que, a lo largo de los siglos, se han ido constituyendo en referentes fundamentales para el quehacer universitario y para entender su papel en las sociedades en cada momento de la historia. La idea de Universidad, me refiero a la de Occidente, nació en la vieja Europa en el siglo xi, especialmente con la aparición de las universidades de Bolonia, Oxford y de París. Uno pudiera arriesgarse a decir que las circunstancias históricas hacían necesaria la aparición de una institución que fuera capaz también de pensar la sociedad, de tomarle el pulso a las dinámicas del conocimiento, además, de generarlo y difundirlo, de ayudar a las personas a dar sentido al devenir y, por supuesto, de marcar derroteros para la incesante búsqueda de la verdad. Ya en la antigua Grecia existían círculos académicos que pudieran servir de antecedentes remotos a la idea de Universidad. Es de todos conocida la Academia de Platón, los peripatéticos del Liceo aristotélico e, incluso, la Biblioteca de Alejandría, que bien pudieron en la Antigüedad acercarse a la idea medieval que llegaría mil años después
La casi milenaria tradición de la Universidad ha permitido crear un conjunto de prácticas con las cuales ésta ha querido hacer presencia en la sociedad e iluminar su contexto desde lo que le es propio y desde las funciones que, a lo largo de los siglos, se han ido constituyendo en referentes fundamentales para el quehacer universitario y para entender su papel en las sociedades en cada momento de la historia. La idea de Universidad, me refiero a la de Occidente, nació en la vieja Europa en el siglo xi, especialmente con la aparición de las universidades de Bolonia, Oxford y de París. Uno pudiera arriesgarse a decir que las circunstancias históricas hacían necesaria la aparición de una institución que fuera capaz también de pensar la sociedad, de tomarle el pulso a las dinámicas del conocimiento, además, de generarlo y difundirlo, de ayudar a las personas a dar sentido al devenir y, por supuesto, de marcar derroteros para la incesante búsqueda de la verdad. Ya en la antigua Grecia existían círculos académicos que pudieran servir de antecedentes remotos a la idea de Universidad. Es de todos conocida la Academia de Platón, los peripatéticos del Liceo aristotélico e, incluso, la Biblioteca de Alejandría, que bien pudieron en la Antigüedad acercarse a la idea medieval que llegaría mil años después